DIOS ESCUCHA TUS ORACIONES - Joseph Prince

DIOS ESCUCHA TUS ORACIONES

Bienaventurados aquellos cuyas transgresiones son perdonadas y cuyos pecados son cubiertos; Bienaventurado el hombre a quien el Señor no le imputará pecado.

Romanos 4:7–8

Algunas personas piensan que si fueran más “justos” con Dios, entonces Él escucharía sus oraciones. Por ejemplo, a veces creen que si no se hubieran peleado con sus esposas o no hubieran tenido esos malos pensamientos al principio del día, Dios respondería a sus oraciones.

Dios no es así. Él quiere que sepa más allá de toda duda que siempre puede venir a Su trono de gracia con valentía y tener plena confianza de que recibirá Su misericordia y gracia (ver Hebreos 4:16). Verá, debido a la obra terminada de Jesús en la cruz, ya está bien con Dios. No necesitas hacer nada para estar más bien con Dios.

De hecho, por la fe en Jesús, ¡has recibido la justicia de Dios mismo (ver 2 Corintios 5:21)! Y no importa cuántos errores cometa, nunca perderá esa justicia porque, en primer lugar, Dios se la dio aparte de sus obras (ver Romanos 4:5–6). En otras palabras, Dios no te imputó justicia porque eras bueno, sino porque creías en Jesús.

Por lo que Jesús hizo por usted en la cruz, todos sus pecados, pasados, presentes y futuros, son perdonados. Dios nunca recordará tus pecados ni los considerará en tu contra (ver Hebreos 8:12, 10:17).

Amigo mío, porque Jesús ha sido castigado por tus pecados, hoy Dios no está contando tus pecados en tu contra. Esto significa que tus pecados no le impedirán escuchar y responder a tus oraciones. De modo que siempre puede correr hacia Su presencia sabiendo que puede permanecer confiado y disfrutar de Su presencia y Su amor.

Cuando conoces esta verdad, te liberará en tu relación con Dios. Puedes hablar con Él sin miedo ni ningún sentimiento de condena. Puedes practicar Su presencia y confiar en que Él siempre te escucha. Si algo sucede en casa o en el trabajo, no siempre tienes que llamar a los líderes de tu iglesia, ¡oras y Dios te escucha!

Amado, eres justo en Cristo y Dios escucha tus oraciones, ¡todo por Jesús!