“No temáis, manada pequeña, porque a vuestro Padre le ha placido daros el reino”.
Lucas 12:32
Nuestro Señor Jesús entró en una sinagoga en sábado, y estaba allí un hombre con una mano seca. Los fariseos buscaban oportunidades para acusar a Jesús de hacer algo malo, así que lo desafiaron diciendo: “¿Es lícito curar en sábado?”.
Nuestro Señor respondió: “¿Qué hombre hay entre vosotros que tiene una oveja, y si se le cae en un hoyo en sábado, no le echa mano y la saca? ¿Cuánto más vale entonces un hombre que una oveja? Por lo tanto, es lícito hacer el bien en sábado”. Entonces le dijo al hombre: "Extiende tu mano", y se la restauró entera como la otra" (Mat. 12:9-13).
Esto es lo que quiero que sepas: cuando alguien está enfermo, el Señor nunca culpa ni condena a la persona. Ve a la persona como una oveja que ha caído en un pozo y necesita ser rescatada.
Si estás lidiando con una condición médica, no permitas que el acusador te descalifique para recibir su sanidad diciéndole cosas como: "Deberías haber cuidado su dieta" o "Deberías haber hecho más ejercicio". Incluso si tuviste la culpa, el Señor Jesús puede sanarte, y Él está muy dispuesto a hacerlo.
Eso no significa que descuides la sabiduría en el cuidado de tu salud. Si se lo permites, el Señor puede guiarte incluso en asuntos prácticos como qué comer y cómo hacer ejercicio. La clave aquí es no prestar atención a la voz de la vergüenza, la condena y la acusación. ¡Escucha en cambio la voz de tu Pastor que viene a rescatarte!
Nuestro Buen Pastor dice que Él da Su vida por las ovejas (Juan 10:11). Pero, ¿conoces el contexto de este versículo? Deja que te enseñe:
“El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir. Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia. Soy el buen pastor. El buen pastor da su vida por las ovejas”.
—Juan 10:10–11
Aunque Él es nuestro Pastor, Él entregó Su vida como el Cordero de Dios. Apocalipsis 5:12 declara: “Digno es el Cordero que fue inmolado”.
¿Por qué Dios usa la imagen del Cordero y no la del Pastor en el sacrificio? Porque Dios quiere que veas que Jesús murió en tu lugar. Él, el Buen Pastor, se hizo Cordero de Dios por vosotros.
Puedes tener vida en abundancia no porque lo mereces sino porque Él dio Su vida por la tuya. Él tomó tus enfermedades y tus dolores y te dio Su integridad y Su salud.
Hoy escucha a tu Señor Jesús decirte: "No temas, porque a tu Padre le ha placido darte el reino". Cualquiera que sea la condición a la que te enfrentes, puedes creer que verás la manifestación completa de tu curación. Continúa participando del Árbol de la Vida a través de la santa comunión y permite que Su vida abundante inunde tu cuerpo cada vez que participas.
AMÉN
ResponderEliminarAmén Gracias Señor Jesús
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