Sacrificio perfecto, perdón total
Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados.
Colosenses 2:13
Nunca estarás seguro de tener el favor inmerecido de Dios si no estás seguro de si Dios te ha perdonado tus pecados. Amado, quiero que sepas que tus pecados no son perdonados según las riquezas de tus buenas obras, sino según las riquezas de la gracia de Dios (favor inmerecido).
Todos tus pecados, pasados, presentes y futuros, han sido perdonados. No dibujes una línea de tiempo del perdón de Dios de tus pecados.
Hay algunos cristianos que creen que el perdón que recibieron se extiende solo desde el día en que nacieron hasta el día en que se hicieron cristianos. A partir de ese momento, piensan que deben andar con mucho cuidado en caso de que pierdan su salvación.
Esta creencia es simplemente antibíblica. Colosenses 2:13 declara claramente que hemos sido perdonados de todos nuestros pecados.
¿Significa "todo" lo mismo para ti que para mí? Mi Biblia dice que todos nuestros pecados han sido perdonados por el único sacrificio de Jesús en la cruz. ¡Hemos sido perdonados de una vez por todas!
Los sumos sacerdotes del antiguo pacto tenían que ofrecer diariamente sacrificios por los pecados. Pero Jesús, nuestro perfecto Sumo Sacerdote del nuevo pacto, ofreció el sacrificio completo y perfecto “de una vez por todas cuando se ofreció a sí mismo” (Hebreos 7:27).
En la cruz, tomó sobre sí mismo todos los pecados que cometerás en tu vida, y pagó de una vez por todas el precio total por todos tus pecados. Cristo no necesita ser crucificado nuevamente por tus pecados futuros.
De hecho, todos tus pecados estaban en el futuro cuando murió en la cruz. Entonces, cuando recibió a Jesús en su corazón, ¡TODOS tus pecados fueron completamente perdonados!
Ahora que sabes que tu deuda por el pecado ha sido completamente liquidada y saldada por Jesús en su nombre, no esperes que Dios trate contigo de acuerdo con tus pecados. Cuando suceda algo negativo, no imagines que Dios viene tras de ti por lo que hiciste en el pasado.
En cambio, toma a Dios en Su Palabra y espere disfrutar de los beneficios del alto precio que Jesús pagó por ti en la cruz. No sembramos nada bueno, pero a través de Jesús, hemos cosechado toda buena bendición.
Eso, amigo mío, se llama favor inmerecido. Y honras lo que Él ha hecho por ti agradeciéndole y esperando que estas bendiciones se manifiesten en tu vida todos los días.
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